“Año del Diálogo y la Reconciliación Nacional”
|
EVALUACIÓN
DE HABILIDADES COMUNICATIVAS 2018
RESPONSABLE:
Mg. ISABEL JIMENEZ CORODVA
PARTE I
COMPRENSIÓN
LECTORA:
NIVELES:
NIVELES:
ü
Literal
ü
Inferencial
ü
Crítico – valorativo
TEXTO
01: Mascar chicle se ha convertido en un riesgo para la
salud, debido a que en lugar de favorecer a las personas, las daña, porque
causa caries, placa dentobacteriana,
agruras, y podría desarrollar una úlcera gástrica o diarrea crónica en
casos severos, según estudios médicos.
De
acuerdo con cifras de estudios médicos, el 80% de la población en nuestro país
tiene caries por mascar esta golosina. Por otra parte, esta información
revela que anualmente cada peruano
consume un kilo 200 gramos en promedio de chicle.
Estas
cifras nos colocan como el segundo país más consumidor de chicle en el mundo,
por esto, el Colegio Médico recomendó a la población dejar este mal
hábito, que además provoca daños a nivel dental y mandibular e influye,
en ciertos casos, en el desarrollo
de úlcera gástrica, una complicación más severa.
Según
investigaciones a cargo de Daniel Karam
precisó que sólo es un mito que mascar chicle quita el hambre, por ello,
la mayoría de
la gente lo
consume, sin embargo,
al iniciar el
proceso de masticación, comienza la digestión y se tiene
sensación de saciedad, pero como los ácidos del estómago trabajan sin alimento,
el riesgo es que la persona presente un cuadro de úlcera gástrica por mascar
chicle durante horas, advirtió el doctor Abel Quiroz Álvarez, estomatólogo de
la Escuela de Medicina de la Universidad Cayetano Heredia.
El
estomatólogo se refirió a la creencia
popular de que mascar chicle ayuda a combatir el estrés. En
cierta medida, estimó,
hay algo de
verdad, porque la
persona tiene una actividad y el simple hecho de estar
masticando le reduce el grado de ansiedad o estrés. Agregó que el mascar
chicle, incide en la proliferación de caries, porque está endulzado con azúcar,
aspartame, sorbitol (edulcorante que se usa en chicles “sin azúcar”) o fenilalanina, que además
favorecen la proliferación de más
placa bacteriana porque hay mayor presencia de bacterias en la boca, aunado a
que la gente no tiene el hábito de cepillarse regularmente los dientes. (Recuperado
el 15 de marzo de 2018, de http://www.eluniversal.com.mx/notas/680993.html -
adaptación)
1. De acuerdo a los datos que presenta el texto,
¿qué porcentaje de la población no padece caries por efectos del chicle?
a.
50% b. 80%
c. 1000% d. 20%
c. 1000% d. 20%
2. Elige la opción que haga referencia a un mito
respecto al chicle.
a.
Combate el mal aliento
b. Aumenta el estrés.
c. Quita el hambre d. Conserva la placa dentobacteriana
c. Quita el hambre d. Conserva la placa dentobacteriana
3. La palabra proliferación, presente en el
párrafo 5, hace referencia a:
a.
la propagación de la caries b. la abundancia de caries
c. la escasez de caries d. la disminución de la caries
c. la escasez de caries d. la disminución de la caries
4. Mascar chicle durante tiempos prolongados
puede tener como consecuencia el desarrollo de:
a.
cáncer b.
diabetes
c. úlcera gástrica d. gastritis
c. úlcera gástrica d. gastritis
5. Las consecuencias de mascar chicle se
potencializan a causa de:
a.
la falta del hábito de cepillarse los dientes
b. el consumo de alimentos endulzados con azúcar
c. la presencia de bacterias en la boca.
d. La ansiedad y el estrés
b. el consumo de alimentos endulzados con azúcar
c. la presencia de bacterias en la boca.
d. La ansiedad y el estrés
TEXTO 02: Quien ofenda al
doctor Francisco Montenegro con una palabra maliciosa, con una sonrisa jorobada
o un gesto amarillento será abofeteado públicamente. Durante sus treinta años
como juez principal de la región, la mano del doctor ha visitado muchas
mejillas altaneras. ¿No abofeteó acaso al sargento Cabrera? ¿No abofeteó al
jefe de la Caja de Depósitos y Consignaciones? Y lo peor: nadie sabe cuándo el
ofensor recibirá la atronadora caricia del doctor. ¿A la salida de la misa? ¿En
el club? ¿En la plaza? ¿En la puerta de su casa? El elegido por sus manos se
cocina en la impaciencia. ¿Un exceso de confianza al dirigirse al doctor? ¿Un
tono de voz muy alto para los oídos del doctor? ¿Considerarlo tan descuidado
como para extraviar una moneda? La reparación exigida por el doctor sería
inevitable.
Cierto
atardecer, por la esquina de la plaza de Yanahuanca, se mostró el doctor. Como
acostumbraba cada atardecer, descendió a la plaza para iniciar su imperturbable
paseo. Hacia las siete de ese frío crepúsculo, se detuvo, consultó su reloj y
se enfiló hacia un caserón de tres pisos. Mientras ascendía por unos escalones
para cruzar el centro de la plaza, una moneda cayó de uno de sus bolsillos,
rodó y se detuvo en la primera grada. En ese momento, don Herón de los Ríos, el
alcalde, que hacía rato esperaba lanzar un sombrerazo de saludo al doctor,
gritó: “¡Don Paco, se le ha caído un sol!”; sin embargo, no hubo respuesta.
Don
Herón, los comerciantes y los muchachos de la zona se aproximaron. Con gesto
inusualmente severo, el alcalde levantó el índice: “¡Que nadie la toque!”. La
noticia se propaló por todas las casas de Yanahuanca: el doctor Montenegro
había extraviado un sol.
“¡Es
el sol del doctor!”, susurraban los pobladores. Prevenidos por el director de
la escuela –“¡No vaya a ser que una imprudencia conduzca a vuestros padres a la
cárcel!”–, los escolares la admiraron al mediodía. Dos horas antes, un mocoso
de ocho años se había atrevido a arañarla con un palito: hasta ahí llegó el
coraje de la provincia.
Tras
la agitación de las primeras semanas, la provincia se acostumbró a convivir con
la moneda. Los comerciantes de la plaza, responsables de primera línea,
vigilaban sigilosamente a los curiosos. Precaución inútil: hasta los indigentes
sabían que apoderarse de esa moneda resultaría nefasto. La moneda llegó a ser
una atracción en toda la provincia.
El
único que nunca tuvo noticias de una moneda destinada a probar la honradez de
la provincia fue quien la extravió. Cada crepúsculo, don Francisco recorría
veinte vueltas exactas. Todas las tardes repetía los doscientos cincuenta y
seis pasos que constituyen la vuelta del polvoriento rectángulo. Durante una
hora, ese caballero contempla el sol del atardecer. Cincuenta y nueve minutos
después de iniciada su entrevista solar, baja la escalera, cruza el portón y se
aleja lentamente. Hasta los perros saben que de seis a siete no se ladra allí.
Noventa
y siete días después del crepúsculo en que rodó la moneda del doctor, de una
cantina salió Encarnación López. Mal aconsejado por el aguardiente, decidió
apoderarse del mitológico sol. En plena noche, susurrando obscenidades,
Encarnación iluminó el sol con su linterna. Recogió la moneda, la metió en el
bolsillo y desapareció. Pasada la resaca, por los labios de su mujer,
Encarnación conoció al día siguiente el bárbaro tamaño de su coraje. Presuroso,
corrió hacia la plaza. Solo cuando descubrió que él mismo, sonámbulo, había
depositado la moneda en su sitio, recuperó la calma.
Inesperadamente,
se había dado el curioso caso de que una provincia dedicada al abigeato se
laqueó de una imprevista honradez. Este florecimiento moral inflamó el orgullo
de los viejos. Cada tarde, preguntaban a los niños: “¿Y la moneda del doctor?”.
“Nadie la ha tocado”. Los ancianos levantaban el índice: “¡Así debe ser; los
honrados no necesitan candados!”.
Con
el pasar de los días, la celebridad de la moneda rebasó las fronteras de la
provincia. Temerosos ante la ignorancia de los extraños, los regidores de
Yanahuanca recorrieron los distritos de la provincia, advirtiendo de casa en
casa que en la plaza de Armas envejecía una moneda intocable. Por supuesto,
nadie la tocó. No bien llegaban forasteros, la chiquillería advertía: “¡Cuidado
con la moneda del doctor!”. Los de afuera sonreían, pero el rostro de los
comerciantes los enfriaba. A pesar de esto, un engreído agente comercial de
Huancayo preguntó burlón: “¿Cómo sigue de salud la moneda?”. Consagración
Mejorada le contestó: “Si usted no vive aquí, no abra la boca”. “Yo vivo en
cualquier parte”, contestó el bellaco, avanzando. Consagración le trancó la
calle con sus dos metros: “Atrévase a tocarla”, tronó. El huancaíno se congeló
y salió corriendo. Consagración, que en el fondo era un cordero, se retiró
confuso. En la esquina, lo felicitó el alcalde: “¡Así hay que ser: derecho!”.
Esa misma noche, se supo que Consagración, cuya única hazaña era beberse sin
parar una botella de aguardiente, había salvado al pueblo. En esa esquina,
conoció la suerte. Porque, no bien amaneció, los comerciantes de la provincia,
orgullosos de que un yanahuanquino le hubiera parado el macho a un badulaque
huancaíno, lo contrataron para descargar, por cien soles mensuales, las
mercaderías.
Cierto
atardecer, casi a la misma hora en que un año antes la extraviara, los ojos del
doctor Montenegro sorprendieron una moneda. Se detuvo delante del escalón.
Recogió el sol y se alejó. Contento de su buena suerte, esa noche reveló en el
club: “¡Señores, me he encontrado un sol en la plaza!”.
La
provincia suspiró. (Adaptado de Redoble por Rancas de Manuel Scorza.)
6. En el texto, ¿quién dio la orden de que nadie
tocara la moneda del doctor Montenegro?
a.
Encarnación López. b El sargento Cabrera.
c Don Herón de los Ríos. d. El jefe policial
c Don Herón de los Ríos. d. El jefe policial
7. ¿Cuál de los siguientes acontecimientos
ocurrió primero en la historia?
a Un grupo de estudiantes admiró la moneda de
la plaza sin tocarla.
b Un niño de 8 años arañó con un palo la moneda que se encontraba en la plaza.
c Los regidores avisaron, de casa en casa, que en la plaza había una moneda intocable.
d . Juez Montenegro recogió su moneda y se marchó.
b Un niño de 8 años arañó con un palo la moneda que se encontraba en la plaza.
c Los regidores avisaron, de casa en casa, que en la plaza había una moneda intocable.
d . Juez Montenegro recogió su moneda y se marchó.
8. En el texto, ¿por qué se dice que
Consagración Mejorada “conoció la suerte”?
a Porque impidió que un forastero tomara la
moneda.
b Porque demostró una gran valentía sin proponérselo.
c Porque lo contrataron para hacer trabajos de descarga.
d. Por qué recibió un premio por su valentía.
b Porque demostró una gran valentía sin proponérselo.
c Porque lo contrataron para hacer trabajos de descarga.
d. Por qué recibió un premio por su valentía.
9. En el texto, ¿cuál es el principal rasgo de
la personalidad del doctor Montenegro?
a. Es prepotente. b. Es olvidadizo.
c. Es precavido. d. Es justo y honesto
c. Es precavido. d. Es justo y honesto
10. ¿Por
qué se dice, al final del texto, que “La provincia suspiró”?
a. Porque
los yanahuanquinos sentían satisfacción de haber sido capaces de salvaguardar
la moneda del doctor Montenegro durante tanto tiempo.
b. Porque
los yanahuanquinos sentían alivio de que el doctor Montenegro ya no fuera a
tomar represalias contra alguno de ellos.
c. Porque
los yanahuanquinos sentían pena de haber perdido la moneda que había sido una
fuente de alegría para toda la provincia.
d. Porque
los yanahuanquinos hicieron fiesta y todos gozaron.
TEXTO
03: “Los efectos positivos de los dispositivos electrónicos
en el rendimiento escolar son, cuando menos, dudosos. Así pues, no debemos
llenar la escuela de dispositivos electrónicos para perseguir la ilusión de
efectos pedagógicos en realidad inexistentes”. Así lo afirma el reputado investigador
Roberto Casati, en su libro Elogio del papel. Cabe acotar que Casati no es
alérgico a las tecnologías digitales (a menudo llamadas tecnologías de la
información y comunicación, o TIC), que utiliza con gran frecuencia porque le
resultan indispensables para muchas de sus actividades. Sin embargo, en lo que
toca al uso de las TIC para el aprendizaje escolar, son diversos los estudios
que confirman la tesis de este autor: el aprendizaje decrece en la medida en
que aumenta el tiempo que los estudiantes ocupan en computadoras, smartphones,
etc.
La
merma en los aprendizajes es perceptible, sobre todo, en la lectura. En este
sentido, las psicólogas educativas Patricia Alexander y Lauren Singer han
hallado que los niños y adolescentes que han crecido con las TIC también pueden
aprender mejor con los libros de papel. Este hallazgo surge de la revisión de
docenas de estudios desde 1992 sobre las diferencias existentes entre la
palabra escrita y digital, cuyos resultados contradicen la creencia,
generalizada entre los estudiantes, de que se aprende mejor leyendo en la
pantalla que con los textos impresos. Pero una cosa es que la lectura digital resulte más
atractiva y otra muy distinta que favorezca una mejor comprensión. Esto se evidencia, en
particular, cuando los textos superan cierta extensión y tratan algún tema con cierto
grado de profundidad.
Los
individuos cuyo contacto con la lectura se da esencialmente a través de una
pantalla son, a menudo, maestros del zapping: pasan con facilidad de un texto a
otro sin detenerse mucho tiempo en uno solo. Esta práctica les proporciona
enormes ventajas para localizar información, e incluso para hacerse una idea
aproximada, aunque a menudo superficial, del contenido de un texto; por ello, es
ideal para satisfacer necesidades inmediatas. Sin embargo, cabe preguntarse si
es una práctica de lectura plena. En realidad, el desarrollo pleno de la
comprensión lectora requiere la capacidad de sostener la atención durante un
tiempo prolongado sobre un texto extenso, así como la puesta en juego del
análisis, del razonamiento, del juicio crítico.
Vale
la pena, por lo tanto, cuestionar el uso que se les da comúnmente a las
diversas tecnologías digitales, sin que su potencial esté en discusión. ¿Se
están poniendo las TIC al servicio de los fines educativos, al margen de los
intereses económicos de las grandes multinacionales tecnológicas? Suele, más
bien, ocurrir al revés. Primero, se llena la escuela de computadoras, tabletas
electrónicas, pizarras digitales y otros artefactos, y, posteriormente, se
discute su uso didáctico. Y a veces ni esto. En tales casos, el imperio
tecnológico sustituye o determina la agenda de la institución educativa. Por
ello mismo, surge la necesidad de ser cuidadosos con las inversiones en
aparatos que pronto se vuelven obsoletos. Hay administraciones educativas que,
de forma irresponsable, firman contratos millonarios, cautivadas por el lustre
y prestigio de la novedad. Sin embargo, es vital conocer las diversas
necesidades educativas de los estudiantes antes de gestionar, en función de
estas, las posibilidades de contar con un artefacto tecnológico pertinente, que
nos ayude a promover mejores aprendizajes.
El
libro y la escuela, afirma Casati, son dos elementos claves de la resistencia a
la digitalización a ultranza, porque se sitúan en una zona todavía
controvertida y disputada, y porque el desarrollo moral e intelectual de los
seres humanos no puede dejarse al albur de la cultura del zapping ni estar
sometido a la carrera desenfrenada del cambio tecnológico. La escuela y los
libros de papel, en efecto, precisan ser protegidos de estas y otras dinámicas
sociales aceleradas. La fuerza de la escuela no consiste en saber adaptarse a
los nuevos tiempos, sino en su capacidad para crear zonas de tranquilidad desde
las que se pueda observar críticamente la evolución de la sociedad.
Una
escuela de calidad que apuesta por un conocimiento sólido, por un aprendizaje
situado y por un pensamiento crítico se sustenta en el triángulo formado por la
lectura, la escritura y la oralidad. Una lectura más atenta, reflexiva y
profunda. Una escritura sustanciosa y pausada que atienda la complejidad que no
soportan las publicaciones cortas en Facebook u otras plataformas digitales
masivas. Una oralidad forjada en la conversación democrática con argumentos y
el intercambio respetuoso de puntos de vista, lejos del ruido mediático donde
triunfa el que más grita. Adaptado de “Elogio del papel (y de la palabra
pausada)” de Jaume Carbonell.
11.
En
el primer párrafo del texto, se menciona lo siguiente:
Cabe acotar que Casati no es
alérgico a las tecnologías digitales (a menudo llamadas tecnologías de la
información y comunicación, o TIC), que utiliza con gran frecuencia porque le
resultan indispensables para muchas de sus actividades
¿Con qué objetivo se incluye esta información
en el texto?
a. Para
evidenciar que Casati tiene una postura contradictoria en cuanto al uso de las
tecnologías de la información en las escuelas.
b. Para
demostrar que Casati comparte la idea de que las tecnologías de la información
contribuyen en la mejora del aprendizaje escolar.
c. Para
aclarar que la crítica de Casati hacia el uso de dispositivos electrónicos en
la escuela no surge de un desconocimiento de las tecnologías de la información.
d. Para
confirmar que Casati no es muy apegado al uso de las redes sociales.
12. ¿Cuál es la idea principal del segundo
párrafo del texto?
a. Las
investigaciones han revelado que la lectura en libros de papel permite un mejor
aprendizaje que la lectura en libros digitales.
b. La merma
en los aprendizajes
de los estudiantes
se percibe en
el desempeño de habilidades comunicativas, como la
lectura.
c. Leer
un texto puede ser más o menos atractivo para el público dependiendo del
formato en que dicho texto se presente.
d. El
uso excesivo de las redes sociales ha
disminuido el aprendizaje en todos los niveles educativos.
13. Según el texto, ¿en qué consiste “la fuerza
de la escuela”?
a.
En apostar por el fomento de un conocimiento
sólido, por un aprendizaje situado y por un pensamiento crítico.
b.
En poner las TIC al servicio de los fines educativos,
al margen de los intereses de las multinacionales tecnológicas.
c.
En poder generar espacios de tranquilidad
desde los cuales los estudiantes puedan observar críticamente la evolución de
la sociedad.
d.
Que los maestros y los alumnos están unidos
para lograr el progreso en conjunto.
14.
De acuerdo con la postura del autor del
texto, ¿qué tienen en común el zapping y la escritura de publicaciones cortas
en Facebook?
a. Ambas actividades están atadas a una dinámica
social acelerada y al cambio tecnológico.
b. Ambas
actividades facilitan la comprensión global del contenido de un texto.
c. Ambas actividades benefician el desarrollo de
habilidades de escritura.
d. Que
les permite intercambiar información en
tiempo real y más rápido.
15.
Cuál de las siguientes afirmaciones es
consistente con la postura del autor sobre el uso de tecnología en las
escuelas?
a. La
lectura de textos en formato digital impide ejercitar el análisis, el
razonamiento, la crítica y la memoria.
b. Muchas
veces, se invierte en recursos tecnológicos sin evaluar su pertinencia ante las
necesidades de aprendizaje de los estudiantes.
c. Es
vital promover el desarrollo de las habilidades comunicativas de los
estudiantes para que se puedan adaptar al acelerado cambio tecnológico.
d. Es
importante desarrollar las habilidades para el uso de las TICs en los
estudiantes.
TEXTO
04:
|
Comentarios
Publicar un comentario